Cuando se trata de cannabinoides, generalmente escuchamos hablar de los más comunes, como el THC y CBD. Pero se han descubierto más de 150 cannabinoides en la planta de cannabis, algunos presentes en cantidades tan mínimas que ni siquiera sabes que están ahí. Y uno de ellos es el hexahidrocannabinol (HHC), un derivado del delta-9 THC que está creciendo mucho en popularidad, ya que tiene efectos que se sienten como THC, pero no es THC. Te contamos todo sobre él.
En la era de los cannabinoides alternativos, el THC y CBD están dejando paso a compuestos minoritarios como delta-8 THC (para una experiencia más relajante) delta-10 THC (para una mayor estimulación y energía) o los poderosos THCP y THC-O (para una experiencia psicodélica). Sin embargo, el hexahidrocannabinol (HHC) es uno de los “nuevos” cannabinoides que más están influyendo en el mercado de la marihuana actual.
Este compuesto saltó a la fama después de que las regulaciones en EE.UU. prohibieran la venta y el uso del delta-8 THC, un análogo del delta-9 THC al igual que el HHC, lo que significa que tienen la misma estructura molecular, pero con una ligera diferencia en la ubicación de un doble enlace.
El hexahidrocannabinol fue sintetizado por primera vez en 1944 por Roger Adams, un químico orgánico estadounidense de la Universidad de Illinois, cuando agregó moléculas de hidrógeno al delta-9 THC en un proceso conocido como hidrogenación. Esto rompe la estructura química de doble enlace del THC y la reemplaza con hidrógeno, pero los efectos y la potencia del cannabinoide permanecen esencialmente sin cambios. Por tanto, el hexahidrocannabinol, o HHC, es una forma hidrogenada de THC.
Si bien Adams creó el HHC a partir del THC convencional derivado del cannabis, en la actualidad este cannabinoide generalmente se obtiene a través de un proceso que comienza con el cáñamo. De hecho, el HHC se encuentra naturalmente en el cannabis, pero solo en concentraciones mínimas. Por eso necesita ser procesado en laboratorio para conseguir las cantidades necesarias para su uso. Es lo que se considera un cannabinoide semi sintético.
Para obtener una cantidad utilizable, se realiza el proceso de hidrogenación para saturar el THC con átomos de hidrógeno en presencia de alta presión y un catalizador como el níquel o el paladio. Pero existen otras formas de obtener HHC.
Cualquier isómero del THC se puede usar para hacer HHC a través de la hidrogenación, incluidos delta-8, delta-9 y delta-10 THC. También es posible convertir CBD en HHC. Básicamente, primero el CBD se extrae del cáñamo, se destila y se aísla en forma de polvo. Luego se obtiene el HHC empleando un reactor químico, en un proceso que distintas empresas ya han empezado a patentar. El HHC también se puede obtener a partir de los terpenos citronelol o L-carvona usando varios catalizadores, alta temperatura, presión y átomos de hidrógeno.
También es posible que veas dos isómeros diferentes etiquetados como HHC: (R)-HHC y (S)-HHC. En realidad son estereoisómeros, compuestos que tienen la misma forma y estructura (los átomos están conectados de igual manera en ambas moléculas) pero diferente forma tridimensional. Es algo así como tu mano derecha e izquierda: son iguales, pero el pulgar de una mano está a la izquierda y el pulgar de la otra está a la derecha.
Ambos estereoisómeros se forman al mismo tiempo, pero la proporción de cada uno puede variar según el tipo de THC utilizado para hacerlos. Sin embargo, en la práctica, la mayoría de las preparaciones de HHC terminan produciendo una mezcla de 50/50 de ambos isómeros.
La hidrogenación es un proceso similar al que se usa para convertir el aceite vegetal en margarina, agregando átomos de hidrógeno a la estructura química para estabilizarla, permitiendo así prolongar la vida útil de los productos horneados. En el caso del cannabis, el HHC es también una forma más estable, ya que en su forma natural, el THC es altamente susceptible a la oxidación y degradación.
Así se crea un compuesto con una vida útil más prolongada y menos susceptibilidad al calor, la luz ultravioleta y el oxígeno, lo que lo convierte en el cannabinoide ideal para los extractos que vendrán en un futuro cercano. Esta alteración aparentemente menor también aumenta la afinidad de unión del HHC por los receptores endocannabinoides CB1 y CB2, así como por los receptores del dolor TRP.
Por tanto, el HHC induce los mismos efectos que el THC debido a su capacidad para unirse a los mismos receptores de cannabinoides, provocando sentimientos de euforia, aumento del ritmo cardíaco y temperatura corporal, así como percepciones visuales y auditivas alteradas. Algunos usuarios de HHC también describen sus efectos como más relajantes que estimulantes.
Pero en general se considera menos potente que el THC. Los expertos aún no se han puesto de acuerdo sobre la potencia exacta del HHC, sin embargo, estiman que es menos potente que delta-9 THC pero más potente que delta-8 THC. Por tanto, el HHC debe consumirse en dosis altas para producir una potencia similar a los compuestos de THC normales, aunque esto varía de persona a persona dependiendo de su nivel de tolerancia y sistema corporal.
Sin embargo, los científicos han descubierto una característica notable del HHC: su alta biodisponibilidad. Esto se refiere a la facilidad con la que el cuerpo puede descomponer y absorber una sustancia. Por el contrario, el THC y el CBD no están completamente biodisponibles, lo que significa que el cuerpo no los absorbe por completo. Como resultado, no experimentamos todos los beneficios del compuesto. Así, el hexahidrocannabinol puede metabolizarse en nuestros cuerpos de manera más eficiente, creando resultados más completos en general.
El HHC aún es muy nuevo, por lo que no hay muchos estudios disponibles para evaluar sus posibles efectos terapéuticos, pero hasta ahora parece que este cannabinoide ofrece la mayor parte de los beneficios que otras formas de THC. Incluso se han realizado algunos estudios en animales que mostraron que el HHC posee efectos analgésicos notables cuando se probó en ratas.
De esta forma, las potenciales propiedades del HHC incluyen:
Los estudios preliminares in vitro también muestran potencial como agente anticancerígeno. Si bien se necesita mucha más investigación, los primeros datos de estudios en animales sugieren que los cannabinoides hidrogenados pueden funcionar tan bien o mejor que sus contrapartes no hidrogenadas para reducir el tamaño de los tumores.
Estos productos derivados del cannabis son relativamente nuevos, por lo que no ha existido el tiempo suficiente para que sus efectos se estudien exhaustivamente. Por lo tanto, hay poca o ninguna investigación sobre el impacto inmediato o a largo plazo del consumo de HHC. Además, no existe una dosis estándar de HHC, por lo que gran parte de la información disponible es especulativa. Hasta el momento, la investigación preliminar indica que el HHC tiene un perfil de seguridad comparable al del THC; y los efectos secundarios informados son similares a los que resultan de las altas dosis de THC, lo que incluye:
Sin embargo, la principal causa de preocupación con el HHC es el uso de productos químicos agresivos durante el proceso de fabricación, así como la formación de subproductos químicos no deseados que pueden llegar al producto final.
Existe mucho debate sobre la legalidad de los cannabinoides como HHC o delta-8 THC. Las empresas que tienen la intención de vender HHC afirman que es completamente legal porque se produce de forma natural en el cáñamo. Sin embargo, como muchos de los otros análogos de THC, no se encuentra en cantidades significativas en la naturaleza y, por lo tanto, debe fabricarse en un laboratorio para obtener un suministro utilizable. Si por este hecho constituye un compuesto natural o sintético es el quid de la cuestión.
Así que su legalidad está sujeta a esta interpretación como cannabinoide semi sintético. El hexahidrocannabinol existe desde hace décadas, pero hace menos de un año que apareció como producto de consumo. Como resultado de su novedad, no existe un conjunto real de reglas para regular su producción y distribución. Esto no significa de ninguna manera que debas darle la espalda: el aumento de la investigación conducirá a la estandarización de este cannabinoide con el tiempo. Por el momento, los producto de HHC existen (y prosperan) en la turbia zona legal entre el cáñamo (que es legal) y la marihuana (que no lo es). Pero, hasta que el HHC entre en un sistema regulado, los consumidores deberán sopesar los riesgos y beneficios de estos compuestos por sí mismos. Solo el tiempo nos dirá si el HHC demuestra ser el cannabinoide de larga duración que nunca supimos que necesitábamos.