En su segundo mandato, el alcalde de Londres, Sadiq Khan, priorizó la lucha contra el consumo de drogas ilegales. Creó una Comisión de Drogas independiente para estudiar las ventajas de despenalizar el cannabis. Basó su decisión en encuestas que mostraban que más de la mitad del Reino Unido apoyaba la legalización del cannabis. En Londres esa cifra casi llegaba a los dos tercios.
La semana pasada, el periódico británico The Telegraph informó de los planes de Khan de poner en marcha un plan piloto para dejar de perseguir a los jóvenes de 18 a 24 años por posesión de cantidades pequeñas de cannabis. Esta noticia provocó una reacción inmediata de Downing Street y de la oposición. Además, noticias falsas compartidas en Twitter, Reddit y Facebook (en inglés) causaron confusión. ¿Qué está pasando realmente en Londres?
Este programa piloto es un ensayo en el que participan tan sólo tres de los 32 distritos de Londres: Bexley, Greenwich y Lewisham. Despenalizaría la posesión de pequeñas cantidades de cannabis y sólo se aplicaría a los jóvenes de 18 a 24 años. La idea de este plan es mantener a los jóvenes alejados del sistema penal y ofrecerles ayuda y apoyo en su lugar.
La Comisión de Drogas está estudiando los efectos de la despenalización del cannabis en todo el mundo, centrándose en Portugal, donde la posesión y el consumo de cannabis están despenalizados desde 2001. Un plan similar en la vecina Irlanda llevó a una caída de casi el 50% de las condenas por posesión de cannabis en 2021 (en inglés). Esto es prometedor para Londres.
Informaciones engañosas llevaron al público a creer que el alcalde de Londres está despenalizando no sólo el cannabis, sino también drogas como la ketamina y el speed. Esta tergiversación de los hechos difundió tanto que se publicó este comunicado (en inglés) en la página web del Ayuntamiento de Londres para aclarar la confusión.
El portavoz de Boris Johnson afirmó que “la despenalización dejaría a los criminales organizados con el control, mientras se arriesga a un aumento del consumo de drogas que impulsa la delincuencia y la violencia que asola nuestras calles.”
El líder laborista, Keir Starmer, se opuso firmemente a cualquier cambio en la ley que implique la despenalización del cannabis. Sin embargo, dentro del mismo partido, el secretario de Justicia del Gabinete en la Sombra David Lammy, había respaldado anteriormente un plan similar que abordaba la injusticia racial. En marzo de 2021, la Comisión sobre Disparidades Raciales y Étnicas recomendó programas de reinserción en lugar de la persecución de los jóvenes de minorías étnicas detenidos con drogas de clase B.
El alcalde Khan no tiene poder legislativo para despenalizar el cannabis y la financiación de este piloto aún necesita la aprobación de la Oficina del Alcalde para la Policía y el Crimen. Lo que hace este plan piloto es establecer las bases para la conversación sobre la legalización y eso es un buen comienzo. Alrededor de 41.900 personas fueron acusadas de delitos relacionados con las drogas en 2020 solamente en Inglaterra y Gales y esto podría cambiar rápidamente, como en Irlanda.