¡Las plantas necesitan la luz del sol para crecer! La elección que hagas del sistema de iluminación para tu cultivo es uno de los pasos más importantes a la hora de diseñar tu cultivo, ya sea con fines comerciales o para producir tu propio cannabis. Hay varios factores a tener en cuenta a la hora de elegir el mejor sistema de iluminación para tu jardín particular.
En esta guía hablaremos de algunos de los equipos de iluminación más comunes utilizados para el cultivo de cannabis, a la vez que echaremos un vistazo a las ventajas e inconvenientes de cada uno de ellos.
Los dispositivos de iluminación HPS (High Pressure sodium en inglés – luces de sodio en español) han sido el estándar en el cultivo comercial de cannabis durante décadas. Las bombillas HPS tienden a emitir luz que es pesada en el lado rojo del espectro y producen una iluminación de alta intensidad, que es perfecta para la fase de floración y la producción de cogollos robustos.
Mientras que en el pasado las bombillas de luz de sodio de 1000 vatios eran el estándar, los cultivadores expertos de hoy en día han aprendido que pueden producir más y hacerlo de forma más eficiente utilizando dos bombillas de 600 vatios en lugar de una sola de 1000 vatios. En gran parte, esto se debe a la cantidad de energía térmica que generan las bombillas HPS. La versión de 1000 vatios es menos eficiente a la hora de convertir la electricidad en energía lumínica utilizable en lugar de energía térmica, en comparación con su hermana de 600 vatios.
El mayor inconveniente de los sistemas de iluminación HPS es que casi siempre requieren el uso de equipos de aire acondicionado para controlar la temperatura en el interior de tu jardín.
Los dispositivos de iluminación MH (Metal-halide lights en inglés – luces de halogenuro metálico en español) también han sido tradicionalmente un estándar para el cultivo; sin embargo, se utilizan más comúnmente durante la fase vegetativa del crecimiento que durante la floración. Las bombillas de halogenuro metálico tienden a producir más luz en el rango azul del espectro luminoso y menos en el rojo, en comparación con las bombillas HPS. Esto es beneficioso durante la fase vegetativa ya que aumenta los nodos al tiempo que disminuye el estiramiento entre ellos. Las bombillas MH no producen la misma cantidad de intensidad de luz total que las bombillas HPS, y esta es otra razón por la que no se suelen utilizar en la fase de floración de las plantas.
Dicho esto, muchos cultivadores han aprendido a utilizar combinaciones de bombillas MH y bombillas HPS en el mismo espacio de su jardín. Hay pruebas que sugieren que una mayor presencia de luz azul durante la fase de floración es beneficiosa para la producción de cannabinoides, terpenos y terpenoides.
Franco Casalone, famoso gurú italiano del cannabis, ha compartido con nosotros su experiencia utilizando bombillas MH y HPS paralelamente durante la floración. Según Franco, tiende a ver que las mismas genéticas maduran más rápido bajo HPS, pero que este aumento de la maduración también crea una gran demanda de magnesio en las plantas.
Al igual que los sistemas HPS, los sistemas de luz MH tienden a producir mucho calor, y por esta razón pueden requerir equipos de aire acondicionado para mantener las temperaturas adecuadas dentro de su cultivo.
Los sistemas de halogenuros metálicos cerámicos (Ceramic metal-halide lights en inglés – luces cerámicas en español) son un tipo más reciente de sistema de iluminación MH que se está utilizando bastante en la agricultura comercial de todo tipo, no solo para el cannabis. Los sistemas de iluminación CMH tienen potencial para crear rendimientos monstruosos por vatio de electricidad consumida. También tienen un increíble espectro de luz que es muy completo. Las bombillas CMH están disponibles con dos espectros diferentes: uno especializado para la fase de floración y otro especializado para la fase vegetativa, aunque mucha gente ha tenido un gran éxito utilizando la bombilla de espectro de floración para ambas fases. Hay pruebas que sugieren que el espectro creado por las bombillas CMH, así como la luz ultravioleta que producen, aumenta el contenido de cannabinoides, terpenos y terpenoides de forma significativa en comparación a la iluminación HPS.
Los dispositivos de iluminación CMH generan mucho menos calor que los sistemas HPS y MH, pero siguen produciendo bastante calor y, normalmente, es necesario tener algún tipo de sistema de aire acondicionado para controlar las temperaturas.
A menudo se habla de los sistemas de luz LED (Light-emitting diode en inglés – luces LED en español) como el futuro del cultivo de cannabis, y probablemente sea cierto. La extrema eficiencia que ofrecen los aparatos de iluminación LED ayudará a la industria del cannabis a ser más sostenible y ya lo ha hecho. La iluminación LED suele consumir mucha menos electricidad por hora que los sistemas de iluminación HPS, MH o CMH por una cantidad de luz comparable.
Los sistemas LED tienen la ventaja adicional de contar con un espectro de luz fácilmente personalizable. En muchos sistemas de iluminación LED, se dispone de diferentes diodos en función de la fase de crecimiento para la que se vayan a utilizar las luces. De hecho, ¡algunos sistemas de iluminación LED son tan avanzados y tienen tantas campanas y silbatos que se puede utilizar una aplicación para el teléfono para cambiar el espectro de luz producido solo tocando un botón!
Debido a que las luces LED producen mucho menos calor que los sistemas de iluminación HPS, MH o CMH, muchos cultivadores pueden prescindir de los equipos de aire acondicionado para controlar la temperatura, al menos durante los meses más fríos del año. Por otro lado, no olvides que una ventilación adecuada sigue siendo muy importante para la salud de tus plantas.
El mayor inconveniente relacionado con los sistemas de iluminación LED, es el coste inicial de la mayoría de los sistemas. Hay una gran cantidad de dispositivos de iluminación LED en el mercado y no todos son iguales. La mayoría de los sistemas de iluminación LED aptos para producir el mejor cannabis son caros, al menos más que los aparatos HPS, MH o CMH. En pocas palabras, la iluminación LED tiene el potencial de tener unos costes de funcionamiento mucho más bajos, pero requiere una inversión inicial mucho mayor.
Las luces CFL (Compact fluorescent light en inglés – luces fluorescentes en español) son algunos de los dispositivos de iluminación más baratos que existen. En su mayor parte, no producen un montón de energía térmica en comparación con la cantidad de luz que producen, aunque para empezar, tampoco producen una luz muy intensa. Los sistemas de iluminación CFL vienen en forma de varillas largas como bombillas, o algunas veces como bombillas redondas como las que puede ver en tu lámpara al lado de tu escritorio.
Los sistemas de iluminación CFL son una gran opción para las plantas madre y para los clones, que no tienen las mismas necesidades de intensidad lumínica que el cannabis en floración o en vegetación.
Esto no quiere decir que no se pueda vegetar o florecer cannabis con estas bombillas. Es absolutamente posible ver una planta hasta la madurez usando luces CFL, sin embargo, el rendimiento y la potencia de tus plantas no alcanzarán los mismos niveles que si alcanzarían con otros sistemas de iluminación.
Debido a su baja producción de calor, las luces CFL no suelen necesitar equipos de aire acondicionado para estabilizar las temperaturas; sin embargo, los clones y las madres, como todas las plantas de cannabis, siguen necesitando una ventilación adecuada para un crecimiento saludable.
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