La ansiedad es una reacción del cuerpo y la mente ante situaciones desconocidas, estresantes o peligrosas. Nos ayuda a mantenernos alerta.
Aún así, un desequilibrio en el nivel de ansiedad puede debilitarnos. Es una especie de agitación interna y un incontrolable estado de preocupación.
También puede manifestarse como mareo, sudoración y un aumento de la frecuencia cardíaca. Suena a mal viaje de marihuana y esto podría ser porque algunas variedades de cannabis pueden causar ansiedad.
Algunos mamíferos tienen receptores cannabinoides. Estos son parte del sistema endocannabinoide, que juega un papel importante en procesos como la memoria, la percepción del dolor, estado de ánimo, apetito, estrés, miedo y ansiedad.
El consumo de cannabis de manera medicinal podría ser de ayuda cuando hay un desequilibrio en ese sistema.
Los compuestos más estudiados del cannabis son dos cannabinoides: El tetrahidrocannabinol (THC) y el cannabidiol (CBD).
Hay estudios que demuestran que dosis suaves de THC pueden aumentar los niveles de serotonina.
La serotonina es un compuesto químico que estimula los sentimientos de bienestar y felicidad, es nuestra aliada para prevenir que el estrés se convierta en depresión.
El CBD parece tener unos efectos ansiolíticos muy fuertes sin efectos ansiógenos (provocadores de ansiedad) en dosis más altas. También parece revertir los efectos ansiógenos del THC.
El cannabis tiene dos cepas principales: Sativa e Indica (Hay poca evidencia científica y poco consenso acerca de las siguientes teorías).
A la variedad indica se la considera más alta en concentración de CBD. Sería una buena opción en casos de dolor físico, para un mejor sueño y para una relajación general. Podría ser la variedad que quieres consumir sobretodo por la noche y la mejor marihuana para la ansiedad.
Sativa contiene una relación de THC mayor que de CBD. Esta sería tu variedad energizante, la que te sube el ánimo y te da un efecto elevador.
Es la marihuana que elegirías para una sesión creativa y la que prefieres consumir de día.
Se le atribuyen propiedades beneficiosas para personas con depresión, dolores de cabeza, náuseas y pérdida de apetito. También sería la que provoca ansiedad en algunas personas.
El CBD no es psicoactivo de la misma manera que el THC ya que no provoca ningún subidón. Interactúa con los receptores del dolor suministrando efectos calmantes y antiinflamatorios. Disminuye la paranoia que puede causar el THC.
Calma el sistema endocannabinoide cuando está hiperactivo. Ha demostrado su éxito en la reducción de depresión, ansiedad, estrés y psicosis. Aumenta la activación de los receptores de serotonina.
La mejor marihuana para la ansiedad será siempre la variedad con el mayor contenido de CBD.
El THC es el componente psicoactivo principal del cannabis. Es el que provoca ese efecto mental elevador. Activa el sistema de recompensa del cerebro y reduce los niveles del dolor.
El THC se parece a los cannabinoides que se dan en el cuerpo de manera natural. Estimula los receptores cannabinoides del cerebro.
El THC también ralentiza la comunicación entre el cerebro y el resto del cuerpo. Esto es lo que le da a la marihuana su efecto calmante. Parece lógico entonces que disminuya la ansiedad en dosis más bajas.
Pero en algunos consumidores las dosis más altas desencadenan síntomas de ansiedad.
Hay varios factores en juego:
El CBD parece reducir la ansiedad en todas las dosis. El aceite de CBD alivia los síntomas de ansiedad a corto plazo.
El CBD puede revertir los efectos ansiogénicos del THC, por lo que durante un mal viaje de cannabis se puede convertir en tu mejor amigo!
BONUS EXTRA: Un par de gotas de aceite de CBD bajo la lengua pueden ayudar a parar una mala experiencia de THC.