El CBD o cannabidiol ha revolucionado el sector cannábico llevando al público mainstream los beneficios de los cannabinoides. Cada vez son más los usuarios que optan por consumir este compuesto del cannabis que no produce efecto psicoactivo y que además ha probado tener múltiples propiedades beneficiosas para la salud. Pero…¿Es seguro consumir CBD durante el embarazo?
El CBD posee propiedades beneficiosas que pueden ser útiles para paliar algunos síntomas del embarazo. Sin embargo, la respuesta a si realmente el CBD es seguro para su consumo durante el embarazo todavía presenta muchas incógnitas de las que hablaremos más abajo en este artículo.
De momento, veamos por qué razones muchas mujeres en cinta se plantean su consumo. Y es que es lógico pensar que el CBD puede ser útil para aliviar algunas de las molestias que se sufren durante el embarazo debido a sus efectos:
El CBD no produce el efecto psicoactivo que sí provoca el THC. Por ello, muchos bancos de semillas se han afanado en crear variedades con altos niveles de CBD; ya sean cepas que contienen ratios de THC/CBD equilibrados, o las llamadas “Pure CBD”, variedades con menos del 1% de THC y alto contenido en CBD que no provocan ningún efecto psicoactivo. Estas últimas han arrasado especialmente entre los usuarios medicinales y aquellos que no toleran los efectos del tetrahidrocannabinol.
Sin embargo, el hecho de que el CBD no provoque el efecto que asociamos a la marihuana no significa necesariamente que no produzca efectos secundarios, ni que sea seguro para su consumo durante el embarazo.
Si bien es cierto que la llamada “Ola del CBD” ha provocado que la comunidad científica se haya volcado en el estudio de este cannabinoide, todavía es necesario realizar más investigación para determinar cómo interactúa esta molécula con nuestro organismo. Es por este motivo que los expertos son precavidos y no recomiendan su consumo cuando se está encinta. Además, existen algunos estudios realizados con animales que contribuyen a desaconsejarlo.
Teniendo en cuenta que dichos estudios son muy limitados, al parecer, una investigación realizada en ratones en el año 1986 determinó que la exposición al CBD durante la gestación afecta al recuento de espermatozoides en la descendencia masculina. Hay considerar que no existen más estudios que apoyen se opongan a esta teoría, y que la investigación se realizó en animales.
Otro estudio (2019), sugiere que la exposición del feto a cannabinoides podría afectar al desarrollo de su sistema inmunitario. Al parecer, estos compuestos tienen la capacidad de atravesar la barrera de la placenta y afectar al feto a través de la interacción con los receptores CB1 y CB2. Hay que destacar que en este estudio se habla de cannabinoides en general, no de CBD específicamente.
Debido a la falta de estudios sobre esta materia, la FDA (Food and Drug Administration) prefiere optar por la precaución y desaconseja totalmente el uso de este cannabinoide durante el embarazo. Sin embargo, se hace patente la necesidad de realizar una mayor investigación sobre este tema para poder determinarlo con más exactitud.
Tal y como acabamos de mencionar, necesitamos realizar más estudios para saber exactamente cómo puede afectar el consumo de CBD al embarazo. Y es que, a pesar de que el cannabidiol posee muchas propiedades beneficiosas para la salud, no se trata de una sustancia inocua.
Al contrario de lo que se cree, sí que existen efectos secundarios probados del consumo de este cannabinoide de manera regular y en cantidades considerables. Lo que sucede es que dichos efectos son muy leves comparados con los de otros medicamentos, y por ello se considera que este cannabinoide tiene un alto nivel de seguridad.
Por tanto, como mínimo podemos establecer que las mujeres embarazadas están expuestas a estos efectos secundarios igual que cualquier otra persona. Estos son:
El postparto es un periodo difícil para las madres porque viene acompañado de múltiples cambios físicos y mentales derivados de los cambios en los niveles hormonales. Muchas mujeres deben lidiar con cansancio, depresión e insomnio durante este periodo, por ello, no es de extrañar que surja la idea de utilizar el CBD para aliviar toda esta montaña rusa emocional.
Lo que sucede es que los estudios realizados hasta ahora para determinar los riesgos del consumo de cannabinoides durante la lactancia se han enfocado principalmente en el THC. Dichos estudios han determinado que sí que es posible trasladar al bebé pequeñas cantidades (2,5% de los niveles de la madre), de este cannabinoide a través de la leche materna.
Por desgracia, como hemos mencionado más arriba, no hay datos todavía para determinar si es peligroso para el bebé que la madre consuma CBD durante la lactancia. Por ello, es necesario que se realice más investigación sobre este tema, pues es un cannabinoide que podría ser muy útil para ayudar a superar la depresión postparto y otras consecuencias derivadas de dar a luz. Por precaución, y porque hoy en día no es posible medir los posibles efectos a corto o largo plazo, la FDA desaconseja totalmente su uso durante la lactancia.
Dado que no existe suficiente información para afirmar que el CBD sea seguro durante el embarazo los expertos recomiendan evitarlo. Sin embargo, su uso sigue siendo una decisión personal, por ello, para aquellas personas que deciden utilizarlo, se recomienda extremar las precauciones.
Uno de los factores a los que hay que prestar atención es al etiquetado que debe informar del origen del producto; no todos los productos a base de CBD que están en el mercado están libres de contaminantes. De hecho, para garantizar su seguridad, dichos productos (ya sean flores, aceites, o edibles) deberían pasar por controles en laboratorios para garantizar que están libres de pesticidas, patógenos y metales pesados.
Otra medida a tener en cuenta si se va a consumir CBD durante el embarazo es el método de consumo; fumar es la vía menos saludable, sería preferible en este caso consumirlo por vía oral.
Dado que los cannabinoides se encuentran principalmente en las flores, y en menor cantidad en las hojas de la planta del cannabis, las semillas se consideran seguras para su consumo. Además, las semillas de cáñamo son el alimento vegetal con mayor cantidad de ácidos grasos (Omega 3 y Omega 9); y contienen arginina y ácido glutámico, que estimulan el sistema inmunológico, unos valores nutricionales que sin duda pueden ser beneficiosos para las mujeres durante este periodo de su vida.